La acupuntura es una técnica milenaria de la medicina tradicional china con más de 2500 años de historia que se ha convertido en una opción válida a la hora de liberar el cuerpo humano de dolor, estrés, ansiedad e incluso para curar algunas enfermedades.
Esta práctica consiste en introducir unas pequeñas agujas en diferentes partes del cuerpo para aliviar el desequilibrio que se genera por el descontrol entre el yin y el yang. Estos puntos son los canales de energía vital o meridianos que recorren todo el organismo.
Principales beneficios
Con el paso de los años, la acupuntura ha evolucionado, lo que ha permitido que cada día más personas vean en ella una alternativa para tratar ciertas dolencias que la medicina tradicional occidental no podría curar sola, a menos que sea de manera invasiva y con el uso de fármacos. Algunos de los beneficios más conocidos son:
Adiós a la ansiedad y el estrés
Es posible que en ciertas ocasiones sufras episodios de ansiedad y eso te genere estrés. Con una sola sesión de acupuntura es muy probable que empieces a sentir que todo se va calmando.
Aunque pequeñas, esas poderosas agujas te ayudarán a equilibrar la energía de tu cuerpo para llevarlo a un estado de relajación.
Ayuda a disminuir el dolor
Uno de los beneficios más reconocidos de la acupuntura es la disminución del dolor, sean agudos como crónicos, gracias a que favorece la regulación del sistema nervioso.
Permite minimizar las reacciones alérgicas
Puede convertirse en una excelente alternativa complementaria que, junto a ciertos medicamentos, ayude a reducir las reacciones alérgicas de la piel.
Asistente para los tratamientos en contra del cáncer
Para nadie es un secreto que esta enfermedad cuando llega cierto punto puede causar mucho dolor y generar altos estados de ansiedad. Es por eso que el uso de la acupuntura se ha convertido en un excelente aliado para reducir ambas consecuencias perjudiciales, así como los efectos secundarios de los tratamientos como la radio y quimioterapia.
Fortalece el sistema inmunológico
Al tratar el sistema nervioso y las energías del cuerpo, puede ayudar a que las defensas ante microorganismos aumenten de manera considerable.
